Entre cerros multicolores, pueblos ancestrales y la esencia viva de los Andes
Viví una experiencia única recorriendo los paisajes más emblemáticos de la Quebrada de Humahuaca, declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, donde cada pueblo guarda historia, color y tradición.
El viaje comienza en el encantador Pueblo de Purmamarca, a los pies del imponente Cerro de los Siete Colores, una de las postales más famosas del norte argentino. Se visita la Iglesia de Santa Rosa de Lima, joya arquitectónica del siglo XVII, y el Mercado Artesanal de la plaza, donde los colores y texturas de los tejidos regionales capturan la esencia del lugar.
El recorrido continúa hacia Tilcara, con una visita al Pucará, antigua fortaleza indígena que conserva las raíces precolombinas de la región. Más adelante, se pasa por Huacalera, cruzando el Trópico de Capricornio, y desde allí se aprecian los tonos vibrantes del cerro conocido como La Pollera de la Colla.
En Uquía, se visita la iglesia que alberga las célebres pinturas de los Ángeles Arcabuceros, un testimonio artístico de la escuela cuzqueña que refleja la fusión entre culturas andinas y coloniales.
La jornada continúa hasta Humahuaca, con su Catedral, su espíritu norteño y el Monumento a los Héroes de la Independencia, obra monumental del escultor Ernesto Soto Avendaño.
Desde allí, el camino se eleva hacia el Abra del Cóndor (3.900 msnm), ofreciendo paisajes majestuosos hasta llegar a Iruya, un pequeño pueblo colgado entre montañas, de calles empedradas y espíritu prehispánico. Pasar la noche en Iruya es vivir un instante fuera del tiempo, en contacto con la quietud y la magia de los Andes.
Al día siguiente, se emprende el regreso a la ciudad de Salta, con el alma colmada de paisajes, historia y cultura norteña.